sábado, 26 de octubre de 2019

Determinantes Sociales de Salud

En este post queremos destacar la visión integral del paciente desde la atención primaria. Como si nos pusiéramos unas gafas de aumento, veremos más allá, al atender la salud y  la enfermedad de las personas. La definición de la Organización Mundial de la Salud  nos recuerda que los determinantes sociales son las circunstancias en las que las personas nacen, crecen, viven, trabajan y envejecen. Son el resultado de la distribución del dinero, el poder y los recursos en el mundo y explican la mayor parte de inequidades sanitarias. Porque los más pobres viven menos y suelen enfermar más.  
El campo de los determinantes sociales de la salud es quizás uno de los más complejos y desafiantes. Se trata de los aspectos claves de la vida y las circunstancias laborales de las personas y de sus estilos de vida. Se interesa por el efecto que ejercen sobre la salud las políticas sociales y económicas y también por los beneficios que pueden aportar los esfuerzos invertidos en el campo de las políticas sanitarias. 
  1. Las circunstancias económicas y sociales asociadas a la pobreza afectan a la salud de por vida. A menor nivel social, menor esperanza de vida.
  2. Las circunstancias que provocan estrés, preocupan a las personas, les crean ansiedad y les hacen sentirse incapaces de salir adelante, perjudican la salud y pueden causar una muerte prematura.
  3. Un buen comienzo en la vida significa apoyar a las madres y a los niños y niñas: el desarrollo temprano y la educación ejercen un impacto sobre la salud que dura toda la vida.
  4. La vida es corta donde su calidad es pobre. La pobreza, la marginación social y la discriminación cuestan vidas porque provocan privaciones y resentimiento.
  5. El estrés en el trabajo eleva el riesgo de enfermedad. Las personas que tienen un mayor control sobre su trabajo están más sanas.
  6. La amistad, las buenas relaciones sociales y unas sólidas redes de apoyo mejoran la salud en el hogar, en el trabajo y en la comunidad.
  7. El consumo de drogas es una respuesta a la desintegración social y además, contribuye a acentuar las desigualdades en el ámbito de la salud
  8. Una buena dieta y un suministro de comida adecuado constituyen dos de los factores más determinantes en la promoción de la salud y el bienestar. Una carencia de comida o la falta de variedad provocan desnutrición y enfermedades carenciales. Un consumo excesivo (considerado también como malnutrición) contribuye al desarrollo de enfermedades cardiovasculares, diabetes, cáncer, enfermedades oculares degenerativas, obesidad y caries dental. 
  9. Un sistema de transporte saludable implica conducir menos y caminar y pedalear más contando con el respaldo de un sistema transporte público mejorado.
En los equipos de atención primaria contamos con la figura del Trabajador Social. En el siguiente vídeo Merche y María nos contarán cuáles son algunas de sus funciones. Nuestro agradecimiento a sus pacientes y nuestras compañeras trabajadores sociales que trabajan con todo el equipo de salud  y mano a mano con nosotras, las enfermeras y las matronas. 
Autora: Carolina González Hernando.


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